Celuloide: Dulce hogar
Por Jesús Ricardo Félix
El recalentado de las fiestas decembrinas se apodera de nuestros refrigeradores y las audiencias permanecen a la expectativa de las famosas novedades navideñas que ofrecen las diversas páginas de streaming. En esta ocasión nos enfocamos en el mundo del drama y el suspenso una vez más, Dulce Hogar es una serie de televisión surcoreana estrenada el 18 de diciembre del 2020 inspirada en el en el webtoon (que sería como un comic pero en internet) del mismo nombre creado por Kim Kan-bi y Hwang Young-chan. Como lo mencioné la semana pasada con la serie japonesa de Alice in Borderland el mercado asiático acapara cada vez más espacio en el menú de las principales plataformas, basta recordar que aquí hemos hablado sobre producciones como Kingdom y Live entre otras. Dicho esto ahora toca el turno de la serie Dulce hogar que por sus características simplemente no podía pasar desapercibida. En este caso no hay zombis pero si monstruos, todo comienza cuando el personaje principal Cha Hyun-soo se muda de apartamento después de haber perdido a su familia en un accidente. A pesar de su estado de ánimo decaído el personaje se percata de que a su alrededor ocurren eventos algo extraños que transforman su manera de ver las cosas. Una extraña enfermedad azota la ciudad y las personas parecen convertirse en monstruos después de una serie de síntomas como el sangrado de nariz. Este mundo post apocalíptico es desconocido para los personajes que se mantienen en la incertidumbre de no saber si lo más seguro es huir fuera del edificio o mantenerse recluidos junto a sus vecinos con el riesgo de que ellos mismos estén contagiados.
La propuesta no resulta a todas luces novedosa pero ofrece buenos efectos en cuanto al diseño de los monstruos se refiere, y es que la mayoría son distintos, uno de ellos recuerda al del Laberinto del Fauno de Guillermo del Toro pues no puede ver solo se guía de la escucha por lo que los personajes deben hacer el menor ruido posible para evitar ser cazados por la bestia. Otro de ellos parece ser una mutación con un caballo pues parece ser súper veloz y acosa a las víctimas aprovechándose de esta cualidad. Por último uno que parece salido de la saga del señor de los anillos, una mole gigante que es una especie de orco al estilo coreano. Están presentes del mismo modo los elementos tradicionales de los guerreros asiáticos que incluyen siempre a un buen espadachín. Como han de imaginar está serie incluye escenas de extrema violencia que un fan de Quentin Tarantino podría tachar de genial pero que raya en el género gore, un ingrediente que se ha hecho constante en el universo asiático. La serie se podría etiquetar más de acción que de terror y como siempre el peligro no está representado tanto en los monstruos o zombis si no hobesianamente hablando por el hombre mismo. Creo que es el tema central que los creadores exploran, como el monstruo, la enfermedad, el zombi puede ser la respuesta de la naturaleza misma poniendo en su lugar a la criatura destructiva que representa la especie humana. Dentro del grupo emergen una serie de conflictos y dilemas que ponen en riesgo la vida de los personajes, como es de esperarse emerge un líder quien toma las decisiones y determina las reglas a seguir por el resto de los integrantes, en este caso el rol es interpretado por un estudiante de medicina llamado Lee Eun-hyuk.
Es evidente que no se trata de una súper producción y por lo mismo hay huecos en la serie que podrían ser la diferencia entre un gran éxito y una serie simplemente buena, pero hay buenas actuaciones y buenas relaciones que se tejen desde el mismo guion, a pesar de que no es innovadora la recomiendo pues resulta entretenida para quienes disfruten de este tipo de propuestas sobre zombis, monstruos y escenarios coreanos post apocalípticos.