La Perinola: Una ley existencial
Por Álex Ramírez-Arballo
Escapar hacia adelante, he aquí la única salida.
Nada hay detrás que pueda ser tocado; si vamos a mirar a los días que ya pasaron que sea solamente para buscar comprender algo. Jamás obsesionarnos con lo imposible, este es un elevado mandamiento.
Escapar del horror de una mente enferma: asumir los días que vienen como posibilidad rica. Es así, el tiempo es sumamente generoso. Los que viven odiando es porque no han comprendido nada; en el fondo no son más que niños con miedo que tiemblan y se hacen pipí en la cama.
Vivir hasta las últimas consecuencias, he aquí una idea que vale la pena. Ser nobles con nosotros mismos, cuidarnos y abrirnos puertas, intentar cosas y avanzar, reconocer nuestras caídas, seguir andando siempre para ver amanecer otra vez.
Encontrarnos con los otros (esto es lo más difícil) y trabajar con ellos, proponerles una vía de acceso a la vida, seducirlos para que caminen con nosotros. No te desanimes si no los convences; de hecho esto es lo más común, esto pasa todo el tiempo. No importa, no te lo tomes a mal, en este mundo hay mucha más gente de la que tú te imaginas.
Reconocer siempre nuestra luminosa pequeñez, aceptarla sin dolores, trabajar en lo que nuestras manos saben hacer para que aprendan a hacer nuevas y mejores cosas. Tenemos toda la vida para intentarlo. No somos inmortales, pero nuestra porción de vida es infinita.
Dejar una huella en la tierra, en el recuerdo de los demás, en el mundo inasible de las ideas. Asumirnos como seres únicos, irrepetibles y necesarios: el mundo espera siempre nuestra palabra. Hay un testimonio que solo a nosotros nos corresponde dar.
Dudemos de lo que creemos o hemos creído de nosotros mismos. Es mentira. Nos movemos en el ámbito de los prejuicios, pero podemos escapar de ellos si rompemos con la rutina, con la inercia, con los caminos ya recorridos por todos. Pero es importante reconocer esto: no podemos ser otros, los que debemos ser, sin pagar nuestra cuota de dolor.
Crecer duele, vivir cuesta, avanzar fatiga. Es así. Es esta la ley existencial que nos rige.
Álex Ramírez-Arballo. Doctor en literaturas hispánicas. Profesor de lengua y literatura en la Penn State University. Escritor, mentor y conferenciante. Amante del documental y de todas las formas de la no ficción. Blogger, vlogger y podcaster. www.alexramirezblog.com
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