Tuercas y tornillos: El sumergible OceanGate y la era de la posverdad
Dr. Mario Alberto Velázquez García | Academia Mexicana de Ciencias
La historia del sumergible de la compañía OceanGate, que sufrió una implosión con cinco turistas a bordo mientras buscaban contemplar los restos del naufragio del Titanic, es la noticia que acapara la atención.
James Cameron, director de la película Titanic y experto en viajes y transportes submarinos, comentó sobre las lecciones que aún no hemos aprendido como sociedad, lamentando las diferentes señales de alerta que se dieron sobre esta “desgracia predecible” y que tuvieron un resultado catastrófico. Cameron señaló que le sorprendían las similitudes entre los sucesos recientes y el hundimiento del famoso transatlántico. Primero, el hecho de que en ambos casos los capitanes decidieron ignorar advertencias: en uno sobre las fallas estructurales de un submarino de fibra de carbono y en el otro sobre un conjunto de iceberg en su ruta. El segundo punto en común es que ambos sucesos ocurrieron en la misma zona.
Una tercera semejanza que comparten es lo que Cameron resume como “las lecciones no aprendidas como sociedad”, en este caso, en relación con la capacidad percibida por los humanos para enfrentarse al entorno. En ambos casos, las personas encargadas de construir y dirigir los proyectos consideraron que sus técnicas, conocimientos y, especialmente, su “voluntad” eran suficientes para “vencer” a la naturaleza. El Titanic fue denominado el barco “insumergible” y, por su parte, el presidente de la compañía (y piloto del sumergible en su fatídico viaje), Stockton Rush, ignoró diversas advertencias de ingenieros y expertos.
Al igual que el Titanic ha sido utilizado como una metáfora de las capacidades humanas frente a la “fuerza de la naturaleza”, el caso de OceanGate se convierte en un ejemplo de la era de la “posverdad”, donde se cuestiona una variedad de hechos que solíamos dar por sentado, como que la Tierra no es plana, que las vacunas son uno de los remedios más efectivos contra las pandemias o que el hombre ya ha llegado a la Luna, entre muchos otros.
Una de las características centrales de esta era de la posverdad no es solo el cuestionamiento de ciertos hechos, sino que, en muchas ocasiones, detrás de este afán por poner en duda un hecho, hay individuos o grupos que alimentan sus posturas con una combinación irracional de creencias, medias verdades e intereses políticos, económicos o culturales. Por ejemplo, Stockton Rush convenció a suficientes personas de que él y su compañía eran capaces de construir un sumergible a base de fibra de vidrio, a pesar de que varios ingenieros y expertos cuestionaron y advirtieron sobre los riesgos. En la era de la posverdad, Rush, en lugar de mostrar datos que demostraran la viabilidad de su propuesta, recurrió al argumento central de esta época: la individualidad y la capacidad única de su “voluntad” y visión, lo cual le permitió “atreverse” a decir y hacer cosas que otros no. Con respecto a los cuestionamientos y la resistencia de los expertos en buceo profundo para certificar su sumergible, él afirmaba: “Estaba cansado de los actores de la industria que intentan usar un argumento de seguridad para detener una innovación”. Es decir, la seguridad es un invento, un pretexto de los “débiles” para no permitir que mentes “liberadas” como la suya pudieran “imaginar cosas asombrosas”, como diría el clásico mexicano.
La posverdad es una época en la que la distorsionada imagen de individualismo que esta era ha consolidado como el centro de las sociedades ha llevado a las personas a pensar que sus ideas y proyectos están por encima de los límites de los principios físicos, como en el caso del sumergible, las presiones a las que un objeto se somete en el fondo del mar.
MARIO ALBERTO VELÁZQUEZ GARCÍA
Profesor- Investigador de El Colegio de Sonora
Miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) nivel 1. Miembro de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC). Doctorado en Ciencias Sociales con Especialidad en Sociología, El Colegio de México. Maestría en Ciencias Sociales con Especialidad en Desarrollo Municipal en El Colegio Mexiquense. Licenciatura en Sociología, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Director de la Revista: “Revista Científica de Estudios Urbano Regionales Hatsö-Hnini”, www.revistahatsohnini.com.mx.