Opinión: Pasto sintético… ¿futbol “artificial”?
¿Más vale malo por conocer? ¿más vale viejo por conocido? De un tiempo a la fecha (unos tres años), se ha popularizado en Hermosillo la utilización de pasto artificial en sustitución del natural en los campos deportivos de beisbol, softbol, futbol y otros deportes que se practican al aire libre.
Por: Jesús M. Corona M.*
Entiendo que la grama artificial se puso de moda en Estados Unidos cuando los estadios de beisbol de las Ligas Mayores que se construyeron para suplir los ya obsoleto, se hicieron con techo y temperatura artificial; sin embargo, esa nueva modalidad fue desechada en muy poco tiempo en virtud de que el material sintético con el que se fabricaba éste provocaba un rebote más vivo en la pelota bateada y, por ello, se dificultaba más su “fildeo”. Además, era causa de más errores y accidentes. La circunstancia misma de que la mayoría de nuestros estadios seguía teniendo el pasto natural, descontrolaba a los jugadores que practicaban menor tiempo en esa nueva superficie artificial y, consecuentemente, le debe un handicap al equipo que sí contaba con él.
En nuestro país, el ejemplo más aleccionador al respecto lo constituyó el estadio “Omnilife”, que es la casa club de Las Chivas de Guadalajara. Ahí, se utilizó la tecnología más avanzada para su diseño, construcción y operación, y se jugó en sus primeras temporadas con este tipo de material. Entonces, los pobres resultados logrados por el “rebaño sagrado” – con todo y su flamante estadio- , causó frustración y enojo a su propietario, Jorge Vergara, y al mexicanísimo estilo mexicano, optó por despedir al “Chepo” de la Torre (porque es más fácil correr a uno que a 25). Luego, contactó a Johan Cruyff, gloria del futbol holandés, y a él y su equipo de entrenadores, nutriólogos, terapistas, preparadores físicos, etcétera, gestando una carretada de euros, los trajeron para que se hicieran cargo del manejo deportivo de Las Chivas, que incluía desde el equipo grande, sucursales -escuelas de futbol y demás infraestructura-, y formación de nuevos talentos como los que recluta una de las organizaciones futboleras más tradicionales y populares de nuestro balompié que, además se distingue porque el equipo está integrado por puros nativos de México.
Y ¿saben ustedes cuál fue una de las primeras decisiones que tomó el prestigiado futbolista, integrante de la famosa “Naranja Mecánica”? Lo adivinaron: sin el menor titubeo, ordenó que levantaran el antideportivo y peligroso pasto artificial.
Hasta donde tengo conocimiento, la rigidez y dureza de este material provoca problemas en las articulaciones, especialmente en las rodillas, que soportan el agresivo impacto al trotar y brincar en el mismo.
Conclusión y sugerencia: sería muy bueno que las autoridades responsables se avocaran a investigar y consultar con los especialistas en Medicina Deportiva sobre la conveniencia o no de seguir equipando las futuras canchas, principalmente las destinadas para la práctica infantil, con este tipo de grama; a reserva de una más docta opinión, su humilde servidor considera que es menos riesgoso correr y brincar en suelo de tierra blanda, en vez de hacerlo en una superficie dura y rasposa.
* L.A.E. Jesús Manuel Corona Martínez. Colaborador