Reductio ad absurdum: Schrödinger y lo paradójicamente malinterpretado
Por: Malasuerte
Esta semana he estado escuchando en la radio , específicamente en el noticiario de Juan Carlos Zúñiga, sobre “El gato de Schrödinger” y el concepto detrás, y no puedo dejar pasar la oportunidad de comentar al respecto.
La paradoja de Schrödinger data de 1935, pero se hizo mainstream hace 9 años cuando en la primera temporada de The Big Bang Theory, el Dr. Sheldon Cooper la utilizó para ejemplificar una relación sentimental hipotética.
Fue concebida por el físico austriaco Edwin Schrödinger, según el cual un gato está encerrado en una caja que contiene, además del animal, un átomo radiactivo, un contador Geiger y una ampolleta de cianuro cuyo contenido cae en un cubo con ácido cada vez que el contador Geiger detecta la emisión de partículas radiactivas. Si se emite la partícula, el detector romperá la ampolleta y el gato morirá. Si no se emite, la ampolleta seguirá intacta y el gato vivirá.
La probabilidad de que el gato permanezca con vida es del 50%. Sólo abriendo la caja averiguaríamos qué le ha ocurrido al gato, pero mientras tanto éste estaría “vivo y muerto a la vez”. Es una forma de expresar un concepto fundamental de la física cuántica: la dualidad onda-partícula, que hace, por ejemplo, que el electrón sea partícula y onda a la vez hasta que lo observamos.
Sin embargo, a pesar de la creencia popular, Schrödinger de hecho trataba de señalar lo absurdo de la teoría cuántica con un ejemplo imposible y no estaba sugiriendo que el gato podría en efecto estar vivo y muerto, un hecho tan imposible como la teoría cuántica.
– PUBLICIDAD –