Ludibria: Miguel Ángel Avilés en el XIV Bajo el Asedio de los Signos
Ramón I. Martínez
Del 27 al 29 de octubre de 2016 se llevó a cabo el XIV encuentro internacional de escritores Bajo el Asedio de los Signos, organizado por Escritores Cajemenses, A. C., lo cual fue un buen pretexto para platicar con lic. Miguel Ángel Avilés Castro, que participó de este acontecimiento distinguido por su calidad y calidez. Nos comparte algunas impresiones generales:
“Este evento tiene la peculiaridad que confluyen varias cosas, como lo es ante todo el rigor literario como una prioridad, la comunión entre los escritores y la extensión social que de la literatura se hace en algunas instituciones educativas (y reclusorios) de Cajeme, pero sobre todo la sobriedad con que se realiza el evento y que pone por encima de todas las cosas que suelen ocurrir en un evento como éste, a la literatura y la calidad de la literatura y de los exponentes sobre el tema.”
Miguel leyó crónica, y nos platica de sus inicios ya remotos en este género literario.
“Lo que pasa es que fui fracasando en todos los géneros, y la última opción que me quedó fue la crónica. A lo mejor ahí también ya fracasé y no me he dado cuenta. Aparte, es lo que me apasiona el asunto de contar la vida, y de contar la vida cotidiana y de contar lo que me está pasando alrededor. Lo que le pasa al diario acontecer de una sociedad, estar contando la microhistoria diaria de cada lugar donde me encuentro y esto se ve reflejado en mi trabajo literario que son crónicas o cronicuentos (como le llamo yo). Hay una diversidad de temas pero ante todo, sin embargo priorizo la historia, y hago mi esfuerzo porque mi trabajo literario tenga cierta calidad en la medida de lo posible.”
Como en tu libro más reciente Diario de mi ciudad
“Sí, Diario de mi ciudad compagina varias cosas. Uno, es el afán de observar lo que pasa, de observarlo con todos los sentidos –con el olfato y el oído, …– pero aparte resume mi actividad y sobre todo mi ejercicio literario, que no se contrapone al ejercicio periodístico, que terminan por concretarse en este libro que plantea la posibilidad de leer un libro como un diario con sus respectivas secciones a diferencia de que este libro (o este diario) no lo van a tirar como se hace con un ejemplar de un periódico, sino que le puede durar por mucho tiempo.”
¿Ha tenido éxito este libro?
“Yo supondría que sí. En primer lugar el éxito personal, que ya salió, y además el premio mismo (Premio Estatal de Crónica Baja California Sur, 2014), y lo que significa el premio, que es la edición del libro y el estímulo económico que te brindan, y te dan la oportunidad de exhibir tu obra cuando andas en eventos como éste Asedio…, o en la Paz o en el Zócalo capitalino. Un premio no te hace más bueno ni más malo sino te permite disciplinarte en un proyecto y hacer que llegue a buen puerto, que éste se disfrute”
¿Proyectos literarios en puerta?
“Tengo algunos, incluso libros formados ya, lo que ando buscando es un editor que se interese en ellos, en lo que yo hago, para reeditar algunos de estos libros o editar estos inéditos que tengo. Mi intención es que pueda llegar más allá del lugar donde radico, a la ciudad de México o a otras partes. Que mi trabajo literario se extienda y vaya hasta donde sea posible en la lectura de la obra. Eso es básicamente lo que estoy buscando y exigirme yo más para mejorar mi trabajo.”
¿En qué libro en particular estás trabajando?
“Tengo un libro de crónicas que creo que es el más acabado y otro de cuentos que creo que requiere un poco más de trabajo. Otro que compila mi columna de ya hace muchos años y otro de temas exclusivamente jurídicos pero desde la crónica también—un trabajo con intención literaria pero desde el campode lo jurídico. Ojalá y los editores se interesaran. He batallado para encontrar editor, salvo un caso aislado, casi todos han sido resultado de la obtención de un premio cuya consecuencia es la edición de un libro y así he publicado. No sé si yo mismo me he limitado para difundir o si a los editores les interesa otro tema, como aspectos del mercado, pero creo que la crónica puede venderse y venderse bien. Entonces, yo estoy con la intención de que se difunda mi obra y encuentre editor. A eso le apuesto, hay que sembrar para cosechar”
*Ramón I. Martínez (Hermosillo, 1971) Maestro en Letras Mexicanas por la UNAM, profesor a nivel bachillerato en el Distrito Federal. Ha publicado Cuerpo breve (IPN-Fundación RAF, 2009). Cursa el doctorado en Humanidades en la UAM-Iztapalapa.
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