Imágenes urbanas: La fiesta del mariachi
Por José Luis Barragán Martínez
Dos trompetas; la trompeta es el sonido fuerte del mariachi, se encarga de sacar la alegría y el valor dondequiera que se encuentren, aquí se estrellan frustraciones, despechos y tristezas.
Dos violines; sonido suave, romántico, el violín es el sonido del amor y de los valses.
Dos guitarras; la guitarra es la armonía, el acompañamiento de todas las canciones.
Vihuela; es el segundo instrumento en importancia después del guitarrón, la guitarra sigue a la vihuela.
Guitarrón; instrumento fundamental, de ahí la frase: “Si no hay guitarrón no hay mariachi”. Es el sonido base sobre el que gira todo, es el que marca las entradas y salidas de los demás instrumentos, incluyendo al vocalista.
Acordeón; incorporado recientemente, causando polémica entre liberales y conservadores.
Y así, con este mínimo de nueve instrumentos se constituye el mariachi, la alegría mexicana del Día de las Madres, Fiestas Patrias y Día de Muertos.
Con todo respeto para la marimba chiapaneca, grupo huasteco o conjunto veracruzano, trova yucateca, rondalla guanajuatense, trío o conjunto moderno; pero cuando el mariachi llega su sonido se impone, despertando el espíritu bravío.
Al llegar al restaurant o negocio donde ofrecerán sus servicios, un elemento al que llaman “Matador” busca al cliente. No cualquiera puede ser “Matador”, se necesita estilo, paciencia, porque así como hay clientes amables también los hay que se molestan.
El del mariachi es un ambiente de broma, de carrilla pesada y es muy conocida la frase: “Quien quiera ponerse a prueba en las lides de aguantar carrilla, que se ponga al tú por tú con un músico de mariachi”.
Se toca en serenatas y onomásticos, inclusive en misas cuando hay bodas o quinceañeras. Se toca de todo: Bolero, ranchero, semi clásica y hasta “Los tres cochinitos” en fiestas infantiles.
El himno del mariachi es el “Son de la Negra” (originario de Nayarit), aunque también son clásicos “El Carretero”, “El Gustito” y “Las Olas”.
En cuanto al “Niño Perdido”, orgullo mariacheril, la trompeta que sale contesta desde diferentes puntos a la trompeta que se queda y de ser posible se entra por una puerta diferente de la que se salió. Hay muchísimas anécdotas del trompeta que sale, desde las correteadas de perros hasta caídas a fosas sépticas o pozos artesianos.
En este ambiente se conoce mucha gente: artistas, empresarios, políticos y civiles.
¿Cuánto cuesta un mariachi? El mariachi es caro, más incluso que la banda sinaloense que cuenta con 18 elementos.
Orgullo nacional es el mariachi, por eso, aunque ya hasta en Japón los hay nunca tendrán el sentimiento para entonar como se debe esta música muy nuestra.
“¿Cuál le tocamos jefe?”
¡Tan tan!
*Por José Luis Barragán Martínez, colaborador