La Perinola: Vale la pena morirse de algo
Por: Álex Ramírez-Arballo
Si algo nos ha enseñado este año que casi termina es que no podemos dar nada por sentado. Todo lo que creemos sólido puede venirse al suelo o desvanecerse en el aire: la vida es definitivamente una caja de sorpresas.
El tiempo trae un nuevo tiempo, es decir, nuevas posibilidades y retos para todos.
Comentaba el otro día con un amigo estas mismas cosas, y él me dijo algo que me caló hondo: “todo lo que he creído, todo por lo que he luchado desde hace mucho parece no tener ahora ningún valor”. Son palabras duras nacidas más de la emoción que de la verdad; lo cierto es que lo que vale la pena ser defendido debe animarnos a caminar siempre, independientemente de cuáles sean las circunstancias de este mundo.
Es fácil navegar con viento a favor, actuar con libertad sin que nada ni nade se nos oponga, hacer la ruta sobre caminos conocidos. Los problemas surgen cuando aparecen antagonistas que nos atacan o cuando una mayoría de personas parecen contradecir lo que hemos creído una verdad compartida. Si es que somos verdaderamente congruentes, son esos momentos de prueba los que nos confirman en nuestras convicciones, los que nos hacen madurar y crecer en nuestra actitudes vitales más profundas.
Si lo pensamos bien, vale la pena morirse de algo, dar testimonio fiel de aquello que asumimos como un valor que debe ser defendido con pasión. No es posible, si tenemos un corazón de carne viva, permanecer al margen de la vida, voltear para otro lado, silbar o lavarnos las manos para tratar de evitar los problemas. El futuro no es algo que se genere espontáneamente sino que emerge de nuestras decisiones, es decir, es producto de nuestra entrega y no de nuestras cobardías y renuncias.
No sé cuál sea tu opinión de todo esto, pero yo creo que uno debe forjar con sus actos un testimonio, dar muestra de que se ha vivido más allá de la inercia y la rutina. “Soy hombre y duro poco”, nos dice Octavio Paz en un poema: que la brevedad de la vida, pues, nos aliente a luchar con alegría para construir con dignidad los días que vienen.
Álex Ramírez-Arballo. Doctor en literaturas hispánicas. Profesor de lengua y literatura en la Penn State University. Escritor, mentor y conferenciante. Amante del documental y de todas las formas de la no ficción. Blogger, vlogger y podcaster.