La Perinola: No somos engranes
Por Álex Ramírez-Arballo
Recuerdo con mucha emoción haber leído siendo un adolescente un libro escrito por el gran Ernesto Sabato: Hombres y engranajes. Aquello me reveló una realidad que, debido a mi edad, no conocía: las personas podemos ser utilizadas sin que nos demos cuenta. Hay un sistema, supe después de leer este ensayo magistral, que alienta y arrebata, que envilece y destruye la condición humana aunque no mate los cuerpos. Desde esos años, que muy rápidamente van quedando atrás, me ha interesado el pensar en las causas de la libertad; sé que ésta es posible y que no depende tanto de la buena o mala fortuna como del esfuerzo personal y comunitario. Para ser libres es preciso saber que somos esclavos.
Encontré en el arte, particularmente en la literatura, una vía de defensa. Al escribir soy libre y puedo construir mundos y experiencias estéticas que muevan y conmuevan; en pocos momentos me siento tan separado de mis obligaciones como cuando me tiro en una cama o en un buen sillón a leer durante horas aquel libro que me ha enganchado.
Con los años he descubierto que existen otras experiencias que refuerzan nuestra libertad y nos humanizan. Por ejemplo, he descubierto que caminar en la naturaleza, salir y encontrarme con la vida en su forma más dada, es altamente liberador y relajante. Hace ya muchos años que semana a semana acumulo un número muy grande de kilómetros caminando por veredas y acompañado solamente por mis propios pensamientos.
Por último, creo que para ser libres debemos separarnos de nuestras obligaciones productivas. Muchos de nosotros hemos crecido con este dogma que nos impide abrazar la vida como algo dado y gratuito; más allá del trabajo animal, que es a lo que estamos obligados día a día, hay un escenario humano de vida sin más objetivo que ser vivida, disfrutada y compartida. Vencer la culpa que nos han inculcado nuestros dueños y gerentes es un acto de hermosa rebeldía que debemos ejercer alguna vez, aunque sea durante las vacaciones.
No somos engranes o piezas de recambio: somos seres únicos, irremplazables y absolutamente luminosos. Nuestro destino no es mover de nueve a cinco una pesada rueda de molino, nuestro destino es encontrar en la vida una fuente inagotable de alegría.
Álex Ramírez-Arballo. Doctor en literaturas hispánicas. Profesor de lengua y literatura en la Penn State University. Escritor, mentor y conferenciante. Amante del documental y de todas las formas de la no ficción. Blogger, vlogger y podcaster. www.alexramirezblog.com
– PUBLICIDAD –
