jueves, noviembre 21, 2024
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La Perinola: La sombra

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Por Álex Ramírez-Arballo
Hablaba el otro día con un amigo mío en México, hablaba él más que yo, muy contrariado por la realidad del país, o lo que él asume como la realidad, que es algo, según me di cuenta, terrible e incluso trágico. Me parece que la persona estaba muy desanimada, decepcionada por un país en el que la violencia y la impunidad van de la mano, abriendo brechas en la carne social y sembrando muertes, injusticia, barbarie. Me hubiera gustado haber tenido en ese momento las palabras exactas, algo que me permitiera expresar un dolor compartido y solidario; opté por el silencio y la atención.

Reflexionando por el tono de mi amigo me doy cuenta de que el pesimismo se ha aposentando como una sombra en el corazón de muchos mexicanos. No es para menos, el clima de zozobra impulsado por la impunidad y la corrupción infunden miedo, es decir, destruyen expectativas de vida, echan por tierra nuestras esperanzas. Es natural que suceda así porque la derrota hunde sus raíces rápidamente y termina por secuestrar nuestra voluntad y nuestros sueños.

Sin embargo, yo creo que debemos abrir un frente común desde un optimismo crítico, sabiendo que nos tenemos a nosotros mismos, que no somos ni asesinos ni ladrones y que somos, gracias a Dios, una infinita mayoría. Contra la sombra del pesimismo el fuego de la voluntad, la luz de la palabra y las acciones de grupo, de comunidad. Un país no son las instituciones, ni la historia, ni el panteón de sus héroes; un país es un presente perpetuo, el compromiso siempre actual de los que ahora viven y que deben sentir en nombre de la humanidad un profundo amor por aquellos con los que comparte la vida, sobre todo los más pequeños. Un país no es una abstracción sino una realidad palpable, material, concreta, hecha de voces y actos, de compromisos y gestos diarios sin los que la vida sería un puro absurdo.

A grandes males grandes remedios, dice el dicho, y yo creo que la situación actual es un mal mayúsculo que reclama nuestra participación de un modo radical. El gran error que muchos cometemos es subestimar las dimensiones de nuestras propias fuerzas. Hagamos la prueba: hoy más que nunca vale la pena.  

 

 

Álex Ramírez-Arballo. Doctor en literaturas hispánicas. Profesor de lengua y literatura en la Penn State University. Escritor, mentor y conferenciante. Amante del documental y de todas las formas de la no ficción. Blogger, vlogger y podcaster. www.alexramirezblog.com


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