El color de las amapas: El origen de las vacaciones y el turismo
Por Ignacio Lagarda Lagarda
La palabra vacaciones, un término que procede del latín vacatio (que significa exento de obligación), y que hace referencia al descanso de una actividad habitual. Se trata del período en el cual las personas que estudian o trabajan suspenden temporalmente sus obligaciones.
En la antigua Roma los días vacantes eran, los días en los que se trabajaba pero que estaban exentos de obligaciones religiosas.
Al referirnos al término vacaciones, hay que tener en cuenta que las hay de distintos tipos: las de las festividades tradicionales ligadas a la religión como Navidad o Semana Santa, y las vacaciones de verano, que son más largas por lo general.
Desde los tiempos antiguos los humanos acostumbraban a descansar en ciertas temporadas del año, normalmente ligadas a los ciclos de la naturaleza, y en esa medida fueron acomodando los festivales de tipo religioso. Como los primeros pobladores fueron agrícolas, estas fiestas se realizaban después de las cosechas, es decir, entre agosto y diciembre.
Los primeros viajes de la humanidad eran; al Oráculo de Delfos, situado en el templo dedicado a Apolo al pie del monte Parnaso, en Grecia; a la Meca, la ciudad natal de Mahoma, la más importante de todas las ciudades santas del islam, visitada cada año por peregrinos musulmanes; a las Olimpiadas, las competencias deportivas organizadas por los antiguos griegos en la ciudad de Olimpia, entre los años 776 a. C. y el 393 d. C.; y al Camino de Santiago, una ruta que recorren caminantes de todo el mundo para llegar a la ciudad de Santiago de Compostela, España, donde se veneran las reliquias del apóstol Santiago el Mayor. Estos viajes eran en su época largos y carentes de comodidades y normalmente se hacían una vez en la vida.
Es decir que los inicios de los viajes de descanso en realidad fueron peregrinajes religiosos.
Con el objetivo de dar algunos consejos a los peregrinos que tomaban el Camino de Santiago de Compostela, en la Edad Media se creó el Códice Calixtino, considerado la primera “guía turística”, en cuyo quinto libro de este antiguo manuscrito, se daba a los viajeros una descripción de la ruta, los sitios importantes a visitar, las hospederías donde alojarse, los eventos destacados, y los peligros que se podían presentar en el camino.
¿Quiénes se tomaron las primeras vacaciones?
Finalizaba la Edad Media y en el Libro de las Leyes o “Las Partidas” del rey de España Alfonso X “el Sabio”, dice que, dada la poca cantidad de trabajo que había durante el verano, los encargados de aplicar las leyes se asignaban un período de descanso, el mismo ejemplo siguió el clero. En aquella época los sacerdotes, que también eran profesores, decidieron que los estudiantes debían descansar durante la época estival (el verano). Por lo tanto, los primeros en tomar vacaciones fueron los jueces y los sacerdotes.
Justamente en esta época empezaron a surgir los primeros “hoteles” o sitios de alojamiento. En principio estos lugares fueron creados para familias acomodadas y sus acompañantes que empezaron a viajar lugares con un mejor clima donde pasar sus días de descanso.
¿Dónde nació el turismo?
En el siglo XVI, en Inglaterra, la realeza inició la costumbre de enviar a sus hijos de viaje, como complemento a su educación. Normalmente el destino era Italia, por el arte y el refinamiento gastronómico en la época. La afición por cultivarse de esta manera se extendió entre las familias adineradas de la época. Estos viajes culturales se llamaban “Grand Tour”. De allí fue que el escritor francés Stendhal en su libro “Recuerdos de un turista” en 1838, adaptó la palabra “turista”, que se define como aquella persona que se traslada más allá de 24 horas e incluye pernoctación, de su territorio de origen o de su residencia habitual a un punto geográfico diferente al suyo con la finalidad de aumentar su conocimiento cultural aprendiendo de otras culturas.
Mientras tanto, en el siglo XVIII en Francia, nace el concepto de “veranear”, popularizado por la aristocracia francesa, que en verano se desplazaba a la región de Champagne.
Durante el siglo XIX el mercado de los viajes toma impulso. La nueva burguesía inglesa con dinero y tiempo, aprovechando el desarrollo del ferrocarril y la navegación para viajar, promueve una serie novedades. Surgen así la primera agencia de viajes y la primera empresa transoceánica. Este hecho le dio la oportunidad de viajar también a las clases menos pudientes.
En 1841, el empresario inglés Thomas Cook, fletó un tren con un grupo de gente con destino a un congreso anti alcohol en de Loughborough, en el condado de Leicestershire, del Reino Unido. A pesar de que ese primer viaje organizado no le proporcionó éxito económico, Cook vio en esa actividad un posible negocio futuro, por lo que años más tarde se decidió a crear la agencia de viajes, Thomas Cook & Son, considerada la primera de la historia. Cook es ahora conocido como la primera persona en organizar el primer viaje con un grupo turístico.
En 1891, Marcellus Berry, un empleado de la empresa American Express, creada en Buffalo, Estados Unidos en 1850, por los señores Wells, Fargo, Butterfield, Livingston y Wasson como “servicio expreso” que transportaba cargas y valores, inventó el Cheque de Viajero en respuesta a las necesidades de los viajeros, especialmente los internacionales, quienes requerían una forma sencilla y segura de transferir fondos para sus viajes.
En 1899, el empresario suizo César Ritz introduce un nuevo concepto de hotel como establecimientos de servicio completo y personalizado con habitaciones de espacio suficiente y decoración cuidada y lujosa con cuarto de baño moderno en cada habitación e introduce la atención directa al cliente (servicio de habitaciones) centralizado en la recepción.
¿ Cuándo nacen las vacaciones pagadas?
En 1936, en Francia, la clase trabajadora logró por primera vez que el gobierno reconociera el derecho a las vacaciones pagadas. Aunque algunas empresas por su propia iniciativa ya tenían esta costumbre, quedó oficializado mediante un decreto. En principio eran 2 semanas al año durante las cuales la gente aprovechaba para viajar a diferentes regiones. Llegó la Segunda Guerra Mundial y al finalizar, otros países de Europa adoptaron la misma medida de los franceses.
Hacia los años 50 ya se había generalizado la ley en diferentes países del mundo. La calidad de vida de la gente mejoró notablemente, dando lugar a un boom turístico que en los años 60 se convirtió en el llamado “turismo de masas”. Fenómeno que a pesar de la crisis de los años 70 no decayó. Y que entre las décadas de los 80 y los 90 se consolidó alrededor del mundo.
Al iniciar el siglo XXI el turismo se diversifica dando origen al viajero o turista independiente. Un turista actual, gracias al internet organiza su propio itinerario, compra los boletos de avión y reserva los cuartos de hotel, o habitaciones, departamentos o casas privadas en renta, y los lugares a visitar.
Prácticamente, las agencias de viajes van en decadencia.
*Ignacio Lagarda Lagarda. Geólogo, maestro en ingeniería y en administración púbica. Historiador y escritor aficionado, ex presidente de la Sociedad Sonorense de Historia.